
France24 Bombardeos aéreos y ataques israelíes dejaron al menos 35 palestinos muertos en distintos puntos de la Franja de Gaza, la mayoría cerca de un centro de distribución de ayuda gestionado por la Fundación Humanitaria de Gaza (GHF), una organización respaldada por Estados Unidos e impuesta por Israel. Mientras, se obstaculizan las iniciativas civiles que buscan romper el bloqueo sobre Gaza, donde la población enfrenta una situación de hambruna.
Al menos 35 personas fueron asesinadas en la Franja de Gaza en las últimas 24 horas, víctimas de bombardeos y disparos.
Según médicos de los hospitales Al-Awda y Al-Aqsa, en el centro del enclave, al menos 15 de las víctimas murieron mientras intentaban acercarse a un centro de distribución de ayuda de la Fundación Humanitaria de Gaza (GHF), situado cerca del corredor de Netzarim. El resto falleció en ataques separados en distintas zonas. Ni el Ejército israelí ni la GHF se han pronunciado sobre los hechos ocurridos este sábado.
En las últimas 48 horas, el Ejército israelí mató al menos 90 palestinos, según el Ministerio de Salud de Gaza, y las cifras llegan con cuentagotas debido al casi total apagón de internet en el enclave. De los fallecidos, 29 en total murieron mientras intentaban recoger alimentos para sí mismos o sus familias.

“Noventa muertos y 605 heridos fueron ingresados en hospitales de la franja en las últimas 48 horas”, detalló el ministerio en su recuento diario.
Con ello, el número total de personas asesinadas —según cifras de las autoridades sanitarias gazatíes— desde el 7 de octubre de 2023 asciende a unas 55.300, un tercio de ellas son niños. Una cifra que además no incluye a los fallecidos por enfermedades o falta de medicamentos.
Mientras tanto, continúan los desplazamientos forzosos. Ese mismo sábado, el Ejército israelí ordenó a los residentes de Khan Yunis y de las localidades vecinas de Abassan y Bani Suheila, en el sur de Gaza, que abandonaran sus hogares y se dirigieran al oeste, hacia una llamada “zona humanitaria”. Las fuerzas israelíes dijeron que actuarían con contundencia contra “organizaciones terroristas” en esa área.
274 muertos al intentar acceder a alimentos
La Fundación Humanitaria de Gaza (GHF), respaldada por Estados Unidos e impuesta por Israel, comenzó a distribuir paquetes de alimentos en mayo mediante un nuevo modelo de ayuda humanitaria que, según Naciones Unidas, no tiene ni imparcialidad ni neutralidad. Desde entonces, al menos 274 personas han sido asesinadas y más de 2.000 heridas cerca de sus centros de distribución, según el Ministerio de Salud de Gaza.
Al inicio de sus operaciones, la fundación negó que los palestinos fueran asesinados al intentar acercarse a los centros de ayuda y acusó a Hamás de mentir. Sin embargo, testigos, fuentes médicas y organizaciones humanitarias confirmaron los hechos y la ONU ha solicitado una investigación independiente.

Israel, que ejerce el control como potencia ocupante en Gaza, ha totalmente restringido el acceso humanitario. Al inicio de la guerra impuso un bloqueo total, y más adelante provocó escasez extrema de alimentos y suministros, especialmente en el norte del enclave.
Las ONG que operan en Gaza han rechazado participar en la iniciativa israelo-estadounidense de la GHF, considerando que representa una confiscación de la ayuda por parte de uno de los actores del conflicto: Israel.
Además, los centros de distribución están ubicados únicamente en el sur y centro del enclave, lo que contribuye a los desplazamientos forzados impulsados por la operación militar ‘Carros de Gedeón’ lanzada en mayo para vaciar el norte de Gaza.
Gaza, el lugar con más hambre en el mundo
La fundación GHF se ha negado a revelar el origen de sus fondos. Según la cadena pública israelí ‘Kan’, el Gobierno de Israel habría aprobado en mayo una transferencia de 176 millones de euros a una institución de defensa, fondos que en realidad habrían sido destinados a financiar este nuevo mecanismo de ayuda en Gaza.
El 3 de junio, la GHF nombró como director a Johnnie Moore, pastor evangélico y exasesor de Donald Trump, quien había respaldado la propuesta de expulsar a los palestinos de Gaza para reemplazarlos por proyectos inmobiliarios.
La ONU alerta que Gaza es actualmente el territorio con mayor nivel de hambre en el planeta: el 100% de su población se encuentra en riesgo de hambruna. Pese a ello, las iniciativas civiles y populares para romper el bloqueo siguen enfrentando múltiples obstáculos impuestos por gobiernos de la región.

Después de la intercepción del bote Madleen —que intentaba entregar alimentos a Gaza— una caravana de voluntarios, el convoy Soumoud (“resistencia”, en árabe), partió desde Túnez rumbo a Gaza. Paralelamente, participantes de la Marcha Global intentan también romper el cerco. Ambas iniciativas humanitarias están siendo bloqueadas.
Caravanas humanitarias bloqueadas en Egipto y Libia
Por otro lado, se reportó que unos 40 participantes de la Marcha Global fueron detenidos a 45 km al este de El Cairo, según un comunicado del colectivo. Allí permanecen retenidos bajo el sol, con sus pasaportes confiscados.
Quince de ellos están encerrados en un hotel de la capital egipcia; entre ellos hay ciudadanos de Francia, España, Canadá, Reino Unido y Turquía.
“Somos un movimiento pacífico y respetamos las leyes egipcias”, afirmaron, e hicieron un llamado a las embajadas para que intervengan y permitan que la marcha continúe.
Por su parte, el convoy Soumoud —compuesto por cientos de personas de Túnez, Argelia, Marruecos y Mauritania— fue bloqueado el viernes por la mañana en la entrada de la ciudad libia de Sirte, bajo control del mariscal Khalifa Haftar. El convoy no pudo avanzar por falta de una autorización oficial de Egipto.
Desde Túnez, Hatem Laouini, militante de la organización Millón de Mujeres Rurales y Sin Tierra, pidió a través de France 24 español que se permita el paso de la caravana.
“Es un acto de solidaridad pacífica. Son militantes, campesinos, sindicalistas, miembros de movimientos sociales que se unieron para denunciar el colonialismo, exigir el fin del genocidio en Gaza y romper el bloqueo para que entre la ayuda humanitaria”, declaró.
La Marcha Global, organizada independientemente en Egipto, reúne a unas 4.000 personas de varios países. Su plan es atravesar el desierto del Sinaí hasta El Arish y caminar los últimos 50 kilómetros hasta el paso de Rafah, en la frontera con Gaza.
Sin embargo, los participantes siguen esperando una autorización oficial. Según el colectivo, en los últimos días decenas de activistas de distintas nacionalidades han sido detenidos a su llegada al aeropuerto o en sus alojamientos. Algunos fueron liberados, otros deportados.
“La violencia con la que muchas personas fueron arrestadas, deportadas o amenazadas no era algo que esperábamos”, declaró el jueves por la noche Hichem Al Ghaoui, uno de los coordinadores, en su cuenta de TikTok.
Madrid se moviliza y Borrell alerta de una escalada global
En Europa, continúan las movilizaciones solidarias con Gaza. Este sábado, cientos de personas se concentraron en Madrid para bajo el lema de “poner fin al genocidio”. Entre los asistentes estuvieron el exjefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, y dirigentes de los partidos de Gobierno, PSOE y Sumar.
La manifestación coincidió con los ataques de Israel contra Irán. Borrell advirtió del riesgo de que el conflicto se extienda a nivel global si algún país árabe decide apoyar militarmente a Teherán. Acusó además al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, de querer prolongar la guerra para garantizar su “supervivencia política” y sabotear un posible acuerdo nuclear entre EE. UU. e Irán.

También instó a la ciudadanía a no olvidar “el horror de Gaza” y a movilizarse como lo hicieron en el pasado contra la guerra de Irak.
Diplomacia europea: alto el fuego y solución de dos Estados
El ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, mantuvo una conversación con su homólogo palestino, Mohamed Mustafa, y reafirmó el compromiso de España con el alto el fuego y la solución de dos Estados.
En la red social X, Albares detalló que ambos abordaron la reciente resolución impulsada por España y respaldada por más de 70 países, aprobada por la Asamblea General de la ONU con 149 votos a favor. El texto exige un alto el fuego inmediato, la liberación de rehenes y la entrada sin condiciones de ayuda humanitaria en Gaza.
La conferencia de la ONU prevista para la próxima semana en Nueva York sobre la solución de los dos Estados fue aplazada debido a la tensión entre Israel e Irán.
Mientras, el ministro de Exteriores de Italia, Antonio Tajani, también conversó este sábado con el presidente israelí, Isaac Herzog, quien aseguró que Israel está dispuesto a aceptar las propuestas de mediadores estadounidenses, egipcios y qataríes para un alto el fuego.
Tajani habló también con el primer ministro palestino, Muhammad Mustafa, a quien reiteró el apoyo de Italia y su solidaridad con la Autoridad Nacional Palestina en foros multilaterales como la ONU y la Unión Europea.