Aarón Chinchilla EP. | Una derrame en el oleoducto de Siquirres, producto de una toma ilegal de combustible, generó una serie de afectaciones en las fuentes de agua y acueducto de la comunidad limonense.
Según trascendió, el miércoles anterior, distintas personas provocaron un daño en una de las tuberías del oleoducto de la Refinadora Costarricense de Petróleo (RECOPE) y en horas de la madrugada del día martes, el combustible llegó a la margen del río Siquirres, afluente que nutre el acueducto que distribuye el líquido vital a las comunidades de Pacuarito, Moravia e Indianas.
De acuerdo a Natalie Montiel, subgerente de sistemas periféricos del Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA), la situación no se abordó inmediatamente, puesto que Recope no informó sobre el daño, no obstante, luego del reporte se activaron los protocolos de emergencia en la planta potibilizadora de la comunidad y se empezaron a realizar acciones en conjunto con la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) y autoridades locales.
“Se cerró la planta de tratamiento y comenzó a drenar a través de los hidrantes que había en las tuberías de distribución (…)”
Entre las medidas que se adoptaron fueron el envío de tres camiones cisternas de 15.000 metros cúbicos que serán distribuidos en centroe médicos y hogares de ancianos de las comunidades afectadas. Asimismo, el Cuerpo de Bomberos y el AyA realizaron la limpieza de tanques y plantas.
En la misma línea, Recope se encuentra realizando actividades de reparación en la zona averiada y se están tomando muestras para garantizar la potabilidad hídrica por medio de análisis de laboratorio.
Estimaciones del AyA señalan que, debido a los daños en el oleoducto, 7 mil personas se encuentra afectadas y sin recurso líquido.