Allan Madriz | EP. El Sindicato de Trabajadoras y Trabajadores de la Educación Costarricense (SEC) rechazó las “medidas represivas” empleadas por el gobierno contra manifestantes la noche del lunes en el sector de Barranca, Puntarenas.
El SEC asegura que alrededor de 400 antimotines, sin previo aviso, agredieron a una minoría de manifestantes que se mantenía de forma pacífica en ese lugar.
“El Sindicato de Trabajadoras y Trabajadores de la Educación Costarricense rechaza de forma categórica la actitud irresponsable de parte del Gobierno de la República, en las figuras del ministro de Seguridad Pública, Michael Soto y del ministro de Comunicación, Juan Carlos Mendoza, quienes han dado lugar a un ambiente de violencia e inseguridad…”, señala el comunicado.
Para el gremio sindical, sin ninguna prueba, el gobierno ha querido adjudicar al movimiento de huelga la responsabilidad por el incidente en el poliducto de Recope, para justificar las agresiones que se han dado durante las últimas 24 horas, en distintas partes del país.
“También es imperdonable que se quiera justificar, invirtiendo las responsabilidades y adjudicándolas al movimiento de huelga, la injustificable violencia y abuso policial con la que la Fuerza Pública trató a un grupo de jóvenes de la comunidad universitaria, al manifestarse pacíficamente en las inmediaciones de la UCR”, agrega el SEC.
A pesar de los hechos de las últimas horas, el gremio sindical asegura que que la lucha seguirá, sin importar las medidas de represión que quieran imponer sobre “la clase trabajadora valiente”, que ha decidido salir a las calles a defender sus derechos.