Eliannys Padra | EP. Un informe de la Organización de Naciones Unidas (ONU), divulgado este martes, reveló que durante los últimos años la desigualdad ha crecido de manera sostenida en Costa Rica, y el último año el país se ubicó en el puesto 66 a escala mundial y noveno en Latinoamérica y el Caribe del Índice de Desarrollo Humano (IDH).
Los datos del Programa de la Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) indican que en el año 2010 el ingreso del 20 % más rico de la población costarricense 16,7 veces más alto que el del 20 % más pobre, sin embargo, durante el 2016 la diferencia llegó a 19 veces.
Asimismo, el informe detalla que ese 20 % de la población más rica acumula el 50,7 % del total de ingresos del país, mientras el 20 % más pobre solo tiene el 3,9 % del dinero.
Con un índice de 0,776 Costa Rica es superada en la región por Chile, Argentina, Barbados, Uruguay, Bahamas, Panamá, Antigua y Barbuda, y Trinidad y Tobago.
La representante auxiliar en Costa Rica del PNUD, Kryssia Brade, destacó que la reducción de la desigualdad es un desafío muy grande de la nación para lograr mantener la estabilidad social. No obstante, resaltó que pese a este lastre el país ha mostrado avances significativos en ámbitos como la educación y la salud.
“Debemos eliminar las prácticas discriminatorias si queremos ampliar los avances en #DesarrolloHumano” – @HelenClarkUNDP, #IDH2016 pic.twitter.com/DrF781C8Oi
— ONU Desarrollo (@pnud) 21 de marzo de 2017
Por su parte, la economista de este programa de la ONU, Gabriela Mata, explicó que Costa Rica pasó de ser uno de los países con menor desigualdad de Latinoamérica a ubicarse en la mitad del listado.
“Costa Rica ya no tiene una posición favorable. Esto puede deberse a factores como que los salarios de los profesionales han tendido a crecer y los de los trabajadores no calificados se han estancado (…) el sistema fiscal del país no es muy progresivo porque no revierte la desigualdad”, dijo Mata.
El informe revela también que en los últimos 25 años Costa Rica mejoró el IDH en 18,8 %, logró aumentar su esperanza de vida en cinco años, subió el promedio de escolaridad en 1,8 años y el ingreso bruto per cápita se duplicó, sin embargo, la desigualdad ha sido una piedra en el desarrollo, y no solo en materia económica, sino también en asuntos de género y grupos étnicos como los indígenas y los afrodescendientes.
En este sentido, Mata indicó que las mujeres de Costa Rica tienen en promedio los mismos años de escolaridad y 5 años más de esperanza de vida que los hombres, pero su ingreso per cápita es la mitad que el de ellos.
“La tasa de participación de la mujer en la fuerza laboral es del 47 %, inferior al promedio de América Latina que es del 52,8 %”, dijo.
Otras cifras señaladas por el PNUD son el 20,5 % de hogares pobres, 50.000 niños fuera de sistema educativo, el 70 % de los indígenas tiene al menos una necesidad básica insatisfecha, y las dificultades laborales y educativas que enfrentan los migrantes, refugiados, afrodescendientes y las personas con discapacidad.
Panorama similar en la Región
El PNUD determinó que Latinoamérica sigue progresando en términos de desarrollo pero continúa lastrada por el problema de la desigualdad.
En conjunto, los Estados de la región tienen un IDH de 0,751 -sobre un máximo de 1- y se sitúan por delante de otras áreas como Asia Oriental y el Pacífico, las naciones árabes, el sur de Asia o el África Subsahariana.
El IDH de Latinoamérica y el Caribe avanzó en el último año ligeramente con respecto al año anterior y se mantiene no demasiado lejos del de Europa y Asia Central, 0,756, sin embargo, dentro del continente hay diferencias muy importantes entre países. Chile, en el puesto 38, y Argentina, en el 45, son los únicos países latinoamericanos con un desarrollo humano muy alto.
Pese a sus diferencias, los países latinoamericanos comparten de manera generalizada el problema de la desigualdad y en casi todos los casos pierden puestos en la lista del IDH ajustada por desigualdad. Así, por ejemplo, Chile retrocede en esa clasificación 12 puestos y Argentina 6.
El informe elaborado este año por el PNUD hace especial hincapié en la necesidad de garantizar que el desarrollo beneficie a toda la población y que no haya grupos que queden excluidos.
Los pueblos indígenas, con más de 400 grupos en Latinoamérica, representan alrededor del 5 por ciento de la población mundial, pero el 15 por ciento de aquellos que viven en la pobreza y suelen tener niveles de educación inferiores.
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— PNUD Perú (@PNUDperu) 21 de marzo de 2017
