Allan Madriz | EP. El presidente de la Unión Médica Nacional (UMN), Edwin Solano, presentó una denuncia penal contra la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS), específicamente contra el presidente ejecutivo Román Macaya, por un supuesto desvió de $225 millones.
Según Solano, la CCSS incurrió en el delito de malversación por utilizar los fondos provenientes del contrato de préstamo con el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF), para invertirlos en títulos valores del Ministerio de Hacienda, con vencimiento al año 2022.
La denuncia está basada en el informe de una auditoría realizada por la Contraloría General de la República, donde donde se cuestiona como irregular el desvío de estos recursos. Los denunciantes sostienen que a pesar de que la CCSS ha reaccionado indicando que se han construido obras, eso no cambia la situación irregular señalada.
“A quien se le ocurre pedir un préstamo, justificado en inversión de mejoramiento del seguro de salud, pero no lo destina a eso, sino que lo invierte en bonos del Estado, y luego recurre a fondos propios para hacer los proyectos por los cuales justificó el préstamo. Esto es irracional, aparte que contraviene los alcances de la ley que aprobó el préstamo”, señaló Solano.
Para Solano, es claro que se está ante un posible delito de malversación de fondos, debido a que un funcionario público realizó un destino diferente al inicial para ese tipo de recursos.
“Del 2016 al 2019, la Caja recibe 225 millones de dólares para ese fin exclusivo, pero no lo usa para fortalecimiento del seguro de salud, sino que, en contra de la Ley que aprobó el préstamo, usa el dinero del préstamo para invertir en fondos del Estado, o sea, le devuelve al Estado, la deuda que este supuestamente le estaba cancelando y usa sus propios recursos…”, agregó Solano.
Sin embargo, las autoridades de la CCSS sostienen que la denuncia realizada por la UMN no es correcta, debido a que los recursos en cuestión están controlados y siendo utilizados para lo que se destinaron.
“De modo tal que no cabe la posibilidad de que podamos de que podamos estar haciendo una desviación de fondos, por la simple razón de que los mismos están identificados para que se dé la trazabilidad de estos recursos en proyectos de obras de infraestructura…”, aseguró Carlos Alfaro, gerente financiero de la CCSS.
De igual manera, señalan que la medida se justifica por los rendimientos obtenidos a través de los títulos valores, ya que en tasas netas de inversión a la vista pueden tener rendimientos del 5%, mientras que de la manera en que dispusieron de mediano a largo plazo, pueden estar entre el 7% y el 10%.
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