Redacción | EP. En medio de las protestas en las calles de Grecia, el Parlamento aprobó las reformas que provocarán una baja en las pensiones y un aumento de impuestos, para acceder a un nuevo tramo del rescate del “Eurogrupo”.
Un total de 153 diputados de la coalición entre Syriza y Anel votaron este domingo a favor de las controvertidas reformas del sistema de las pensiones y fiscales, con las cuales el Gobierno busca ahorrar 1.800 millones de euros al año y recaudar 1.800 millones más.
Para protestar contra el paquete de reformas, sindicatos convocaron para viernes y sábado anterior una huelga de 48 horas y este domingo, además de paros en el transporte y el comercio, se manifestaron frente al Parlamento, en la plaza Syntagma.
El primer ministro griego y criticado ahora, Alexis Tsipras, defendió la decisión gubernamental ante el Parlamento, después de haber negociado hace meses con líderes europeos el tercer rescate de los helénicos.
“Con esta reforma que votamos hoy, buscamos crear un sistema de seguridad social viable que garantice las pensiones de todos los ciudadanos y al mismo tiempo lo haga con justicia social, teniendo en cuenta la difícil situación económica”, indicó Tsipras.
La reforma de las pensiones prevé un recorte de las pensiones suplementarias y de las pensiones futuras. Mientras tanto, la reforma fiscal, introduce una incremento generalizado en el impuesto de renta y más incrementos en los impuestos indirectos.