George Rodríguez EP. La República Popular China podría vetar una eventual resolución sobre Nicaragua por parte del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, organismo al cual Estados Unidos proyecta plantear que aborde la violenta crisis sociopolítica que golpea al país centroamericano, señaló este martes el ex canciller nicaragüense Francisco Aguirre Sacasa.
La embajadora de Estados Unidos en Naciones Unidas, Nikki Haley, quien desde el 3 de setiembre ejerce la mensualmente rotativa presidencia del consejo, y es una fuerte crítica de la administración del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, propondría la inclusión del tema en la agenda del organismo, indicó Aguirre, al canal de televisión nicaragüense 100% Noticias.
China -junto con Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña y Rusia- es parte del grupo de cinco países miembros permanentes, y con poder de veto, del consejo de quince integrantes.
Según Aguirre, si bien Rusia –al igual que China- es aliada de Nicaragua, el vínculo personal el presidente ruso, Vladimir Putin, y su colega estadounidense, Donald Trump, inclinaría al país europeo a apoyar una resolución del organismo, la que sería presentada por Estados Unidos y se prevé, por lo tanto, contraria al gobierno de Ortega.
“La presidenta actual (del Consejo de Seguridad) de las Naciones Unidas, Nikki Haley, ha sido una de las voces más críticas del gobierno de Daniel Ortega y de los abusos que se han dado acá. Entonces, no debería sorprendernos que ella fuera a poner, en la agenda del Consejo de Seguridad, el tema de Nicaragua”, señaló Aguirre, quien reafirmó que “no se puede descartar eso, y las expectativas es que eso se va a dar”.
En cuanto a las posibles respectivas posiciones de Rusia y China ante una eventual resolución sobre Nicaragua, el ex canciller dijo que, si bien Rusia la apoyaría, China la vetaría, como manera de responder a Estados Unidos en el marco de la guerra comercial que enfrenta a ambos países.
“Ha habido un acercamiento personal entre el presidente norteamericano y el presidente ruso, y, a lo mejor, eso va a pesar más en la decisión rusa que la amistad que él tiene con nuestro país”, señaló.
Pero la tensión entre los gobiernos chino y estadounidense haría prever un escenario opuesto, de acuerdo con el análisis de Aguirre, un ex embajador de Nicaragua en Estados Unidos.
“En el caso de China y Estados Unidos, las relaciones son tensas (…) porque Trump está molesto por el superávit comercial que tiene China con los Estados Unidos y está amenazando a Beijing con aranceles muy altos, entonces ellos (el gobierno asiático) por desquitarse podrían ellos vetar una acción contra Nicaragua”, reflexionó.
Aguirre formuló las declaraciones un día después de que Haley vaticinó intensa actividad, en el consejo, durante el mes de su presidencia.
“Hoy comenzamos nuestra presidencia del Consejo de Seguridad de la ONU. Será un mes ocupado e intenso”, escribió la embajadora, en la red social Twitter, y agregó que “yo y nuestro equipo de @USUN (Delegación de Estados Unidos en Naciones Unidas) no podemos estar más orgullosos de liderar este momento importante en el mundo”.
Durante una visita que realizó en agosto a Colombia, Haley expresó que “estamos intentando que haya una reunión del Consejo de Seguridad, sobre Nicaragua”.
De acuerdo con versiones periodísticas, el organismo internacional abordaría el 5 de setiembre el tema de la crisis que golpea hace algo más de cuatro meses a Nicaragua.
La dramática situación se originó, el 18 de abril, en el decreto presidencial que apuntaba a reformar el sistema de pensiones del Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS).
El retiro, días después, del decreto, determinó que la masiva protesta popular que desató se enfocase en la actual exigencia de que Ortega y su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, renuncien a sus respectivos cargos.
La respuesta de la pareja gubernamental ha consistido en intensificar la represión policial y parapolicial antiopositora, la que ha cobrado alrededor de 500 vidas, generado más de dos mil heridos, detenidos y desaparecidos, y causado daño a la economía nacional.