El Día Mundial de la Propiedad Intelectual, celebrado cada 26 de abril, es una fecha especial para recordar la importancia de proteger el resultado de las ideas innovadoras y las creaciones empresariales. Sin embargo, también es una oportunidad para destacar que la propiedad intelectual (PI) no es un privilegio exclusivo de las grandes corporaciones, sino un activo fundamental al que las pequeñas y medianas empresas (pymes) deben recurrir para promover su éxito y crecimiento.