Allan Madriz | EP. En el foro “Humedal Cariari APM”, realizado en el Instituto Tecnológico de Costa Rica en Cartago, ambientalistas denunciaron daños incalculables e irreversibles en el Humedal Cariari por obras realizadas en el “mega puerto” de APM Terminals.
La actividad contó con la participación de la diputada del Frente Amplio, Ligia Fallas, y Sara Chinchilla, Administradora y Coordinadora del Centro de Rescate Wildlife Sanctuary; que se encargaron de exponer el aparente daño ecológico que ha sufrido el ecosistema de la zona por la construcción de obras como la Ruta 257, dragados y la plataforma donde se construirá el nuevo puerto de la empresa holandesa.
La legisladora indicó que se ha vertido más de 10 millones de toneladas de material sobre la vida marina existente, con daños a especies como el manatí. Además señaló que esto va en contra del Convenio RAMSAR, cuya misión es la conservación de los humedales.
“A mí hay cosas que no me quedan claras, he estado en todos los procesos legales y movilizaciones; pero hay cosas que uno no entiende, si yo quiero que un proyecto pase, trato de generar el mínimo conflicto, pero este proyecto no ha sido así”, manifestó Fallas.
Asimismo indicó que la Ruta 257 se ha construido con serias irregularidades y se ha subido el presupuesto hasta casi los 20 mil millones de colones, donde el Humedal se ha visto alterado por el relleno realizado en el mismo, para la construcción de la carretera, lo que provocó la pérdida de especies endémicas.
“Esta carretera tiene unos 12 metros de relleno, unos 60 metros de ancho para abarcar los cuatro carriles y son casi 3 kilómetros, que alguien me diga a mí a qué hora se puede regenerar el ecosistema, después de haber vertido todo ese material, esto no se va recuperar nunca”, señaló la legisladora.
La otra expositora, Sara Chinchilla, indicó que desde que llegaron los representantes de APM a negociar con los pobladores, les pusieron un panorama ambiental muy distinto a lo que sucedió y que además cerraron el centro de rescate de la zona, que brindaba un servicio de voluntariado para atender especies que necesitaban atención.
“Este proyecto de APM Terminals desde el principio ha sido una falsedad, llena de engaños, vicios e irregularidades; esto ha afectado terriblemente no solo al ecosistema, sino la vida de muchas personas que vivían en armonía con la naturaleza”, indicó Chinchilla.
Además señaló que no es cierto que la construcción de este nuevo puerto vaya a traer más trabajo a la zona, sino todo lo contrario, que choferes, guías turísticos y vendedores han perdido ingresos por el cierre de toda esta zona de gran importancia ecológica.
Ligia Fallas, finalizó la actividad indicando que la lucha ambiental continúa y que ellos tienen en todas las instancias legales del país recursos presentados para detener la construcción de esta obra y así evitar mayores daños ambientales en la zona.