

Elvis Martínez. Egipto ha sido declarado en estado de emergencia luego de la masacre perpetrada contra cientos de manifestantes opositores y partidarios del expresidente Mursi. La cifra oficial indica que las víctima supera las 275 personas muertas durante los actos de violencia por desalojar las acampadas de los Hermanos Musulmanes. Entre las víctimas se cuenta a 47 policías.
Tras varios días de aviso la policía egipcia accedió a primera hora del miércoles a los campamentos instalados en las Plazas de Rabea al Adauiya y del Nahda, después que el Ejército egipció anunció la suspención temporal de la Constitución y el derrocamiento del presidente Mohammed Mursi.
Varios centros hospitalarios de El Cairo han atendido a decenas de heridos. Mientras que los cuerpos de las víctimas yacen aún en algunos centros médicos a la espera del reconocimiento.
Los Hermanos Musulmanes elevan la cifra de fallecidos a más de 600. Los islamistas aseguran que las Fuerzas de Seguridad abieron fuego contra los manifestantes durante el desalojo, sin embargo, el ministerio de Interior egipcio lo ha negado. Las autoridades egipcias atribuyen que las señales de balas en los cadáberes se dieron por los disparos efectuados por los propios manifestantes.
El primer ministro de Egipto, Hazem El Beblawi, dijo en cadena de televisiòn que los agentes de las fuerzas de seguridad se vieron forzados a intervenir tras agotar todas las oportunidades de para una solución pacífica. Añadió que los manifestantes seguidores de Morsi portaban armas ilegales y que ya habían asaltado propiedades públicas y privadas, “atacando los intereses del pueblo. Esto es un asalto a los ciudadanos y a la autoridad del estado, que debe ser respetada por encima de todo”, indicó.
Alastair Beach, corresponsal de The Independent, ha documento la situación en los centros hospitalarios. Beach, compartió en Twitter fotos de 42 cadáveres en un improvisado hospital de campaña. Las imágenes son desgarradoras.
Bel Trew, periodista de Actualidad RT, narró a la cadena de televisión que nunca vivió una batalla tan sangrienta en Egipto.
“Nunca he visto una batalla más sangrienta en Egipto. Las fuerzas de seguridad nos mantuvieron detrás de los coches bajo una lluvia de balas durante 8 horas seguidas”, escribió Bel Trew en su cuenta de twitter.
“La Policía y los militares disparaban intensamente contra cualquiera que se aproximara al campamento, incluso a periodistas como yo, así como a familiares de los atrapados en el campamento. Tuve que esconderme detrás de los coches y las vallas de hormigón que pude encontrar. Enfrente abrieron fuego sobre mí, desde arriba. También utilizaron gas lacrimógeno hasta tal punto que costaba mucho respirar. No puedo decir con qué disparaban, pero oí disparos, creo que de armas automáticas y rifles”, manifestó Bel Trew.
Tras la violenta jornada de desalojo miles de egipcio han salido a protestar en varias ciudadades, sobre todo al norte de Alejandría y Asuán, así como en El Cairo. Las autoridades han decretado estado de emergencia durante un mes y han establecido toque de queda y se ha ordenado la suspensión de servicios de trenes en varias provincias del Sur, informó la agencia estatal de noticias MENA.
El vicepresidente del Gobierno interino, Mohamed el Baradei, presentó su dimisión tras los hechos de violencia.
“Presento mi dimisión del puesto de vicepresidente y pido a Dios el altísimo que preserve nuestro querido Egipto de todo lo malo, y que cumpla las esperanzas y aspiraciones de pueblo”, expresó el Baradei en una carta emitida al jefe de Estado interino.
Reacción Internacional
Varios organismos internacionales como la Uniòó Africana, la Unión Europea y las Naciones Unidas han condenado la escalada de violencia en Egipto y han hecho un llamado a las partes para que recurran al diálogo.
El Secretario General de la ONU,Ban Ki-moon, condenó en los términos más enérgicos la violencia utilizada por las fuerzas de seguridad de Egipto en El Cairo para dispersar los plantones y manifestaciones de los seguidores del presidente depuesto, Mohammed Morsi.
Por su parte el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, ha pedido a las partes implicadas que se abstengan del uso de la violencia.
La Unión Europea, a través de su portavoz Peter Stano,calificó de extremadamente preocupantes el número de víctimas. “La violencia no ofrece soluciones y por eso estamos instando con fuerza a todas las partes a ejercer la mayor contención”, expresó Stano.
Fuentes: Twitter, RT, Diarioes, agencia de noticias MENA y cables internacionales.