Eliannys Padra | EP. El respeto a los derechos humanos de los migrantes, así como el impulso de formas de cooperación y alianzas público-privadas para avanzar hacia el desarrollo son los temas que destacan en la declaración final de la XVI Cumbre de Tuxtla que se llevó a cabo en Costa Rica.
Durante la reunión de Jefes de Estado y de Gobierno de los países integrantes del Proyecto Mesoamérica (PM) la migración fue un tema recurrente que recibió gran énfasis por parte de los mandatarios y cancilleres presentes.
Los representantes de los 10 países miembros del mecanismo centraron su atención sobre las políticas del presidente estadounidense Donald Trump, quien prevé construir un muro a lo largo de la frontera con México. Asimismo, los países expresaron su solidaridad con la nación azteca y destacaron la necesidad de crear medidas que permitan preservar los derechos humanos de los migrantes.
El presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, destacó que ninguno de los países mesoamericanos escapa del fenómeno de la migración, ya sea como lugares de origen, de tránsito o destino de los migrantes.
“Es necesario entablar un diálogo regional en torno al tema de personas migrantes y refugiadas. Los desplazamientos han alcanzado un nivel sin precedentes. Esta realidad exige respuestas coherentes e integrales”, dijo Solís.
Por su parte, el mandatario colombiano, Juan Manuel Santos, exhortó a la región a estar más unida que nunca y destacó que “el mejor muro que se puede construir es el progreso de Mesoamérica en la medida en que seamos exitosos en el cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible”.
Ante los mensajes de apoyo, el presidente de México, Enrique Peña Nieto, expresó su agradecimiento por la solidaridad en esta situación que califica como una etapa de redefinición de relaciones con EE.UU.
“México aprecia y ve con optimismo esta redefinición del marco de la relación entre ambos países para trabajar de manera positiva a través del diálogo y haciendo de él, el mecanismo que nos permita superar cualquier diferencia”, dijo.
Declaración final en consenso
La declaración política de la cumbre de Tuxtla fue adoptada en consenso y destaca la “preocupación por el aumento de acciones que discriminan a las personas migrantes, y reafirmar nuestro profundo rechazo al racismo y todas las formas de discriminación, xenofobia, intolerancia y criminalización en contra de los migrantes”.
Los países del PM abogan por un “enfoque integral para la atención de las causas estructurales que originan la migración, el pleno respeto de los derechos humanos de los migrantes y una mayor cooperación internacional entre los países de origen, tránsito y destino, de conformidad con el derecho internacional”.
La cumbre tuvo como eje central el desarrollo de las alianzas público-privadas para el desarrollo de la región, y el texto final deja ver que los representantes de los países coincidieron en que es necesario una mayor participación del sector privado y la sociedad civil para alcanzar esta meta.
“Promover la construcción de alianzas público-privadas para el desarrollo con el fin de consolidar sinergias para contribuir con la consecución de los objetivos prioritarios del Mecanismo, especialmente en temas de infraestructura, facilitación comercial y competitividad, innovación y emprendedurismo”, reza la declaración final.
La XVI Cumbre de Tuxtla se desarrolló bajo el lema “Mesoamérica nos une” y tuvo como sede Costa Rica. En este evento, Solís recibió a los mandatarios de México, Enrique Peña Nieto; Colombia, Juan Manuel Santos; Guatemala, Jimmy Morales; Panamá, Juan Carlos Varela.
Por su parte, Honduras, El Salvador, República Dominicana, Belice y Nicaragua, enviaron representantes a nivel de cancilleres o vicepresidencia.
La próxima cumbre del Mecanismo de Tuxtla se realizará en 2019 en Honduras.
