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Elvis Martínez | EP. Cientos de miles de personas salieron a las calles de Barcelona para celebrar la Diada de Catalunya (Día de Cataluña), en un acto reivindicativo que impulsa el proceso independentista de la República Catalana.
La “Via Lliure a la República catalana”, como fue bautizada la manifestación, es organizada por la Assemblea Nacional Catalana (ANC) con el apoyo de otros colectivos independentistas.
Los organizadores calculan que a la marcha asistieron dos millones de personas, mientras que la Guardia Urbana contabiliza 1.4 millones de asistentes, siendo la manifestación más grande de los últimos tiempos en Europa.
La llegada de manifestantes provocó que el transporte público y, principalmente, las estaciones del metro de Barcelona, colapsaran porque nunca se había transportado a tanta gente en un mismo día.
Los seis kilómetros de la vía de La Meridiana de Barcelona se convirtió en un lugar pequeño ante la presencia de miles de personas en la manifestación independentista de este año, previo a las elecciones que se celebrarán el próximo 27 de septiembre.
Con gritos de “Independencia, independencia”, “Visca Catalunya. Independencia” los manifestantes desplegaron una estelada gigante (bandera independentista de Barcelona). La marcha dividida en tramos de diferentes colores era guiada por un punto que cruzó los seis kilómetros de la Meridiana apuntando en dirección al Parlamento de Cataluña.
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El acto masivo ha caído como un baldazo de agua fría al Gobierno central del PP quien han calificado la actividad como una acción que coloca fronteras entre los catalanes.
En su declaración el ‘president’ Artur Mas, dijo sentirse “orgulloso de su país y del comportamiento ejemplar que estáis teniendo” e insistió que la manifestación “es un mensaje potentísimo a Europa y al mundo”
“Dejad de amenazar con las leyes, somos gente normal e ilusionada. Si hay que cambiar alguna ley, no pasa nada, no se hundirá el mundo. Tenemos derecho a ser escuchados”, dijo Mas en su directo mensaje al Gobierno de Rajoy.
“No vamos contra España ni contra nadie… Vamos a favor del derecho a decidir, a favor del derecho a vivir mejor”, agregó Mas.
En tanto Jordi Sànchez, presidente de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), fue más allá al señalar que con la legitimidad de la gente en la calle y de las urnas dejarán España y que ante eso Europa “no puede dejar de escuchar es el mandato de las urnas”.
“Queremos tener un Estado leal con la gente de nuestro país, no queremos seguir formando parte ni un minuto más del Reino de España”, expresó Sánchez.
La Diada de Catalunya se celebra cada 11 de septiembre como recordatorio de la caída de Barcelona y la abolición de las instituciones catalanas por parte de Felipe V de España en septiembre de 1714. Tras la abolición de las leyes e instituciones propias catalanas con la promulgación del Decreto de Nueva Planta, el Principado de Cataluña dejó de existir como estado y pasó a ser una provincia más de la Monarquía.
Las manifestaciones a favor de la independencia han aumentado desde el 2012 reclamando un referéndum de derecho de autodeterminación del pueblo catalán, el cual ha sido denegado por el Gobierno central por no estar estipulado en la Constitución de España.
Mientras tanto, son más los catalanes que se suman a las masivas marchas y en ese proceso el pasado 3 de agosto fueron convocadas las elecciones anticipadas por Artur Mas, presidente de la Generalitat.
El objetivo es renovar el Parlament (Parlamento de Catalunya) compuesto por 135 escaños, donde se necesitan el voto favorable de 68 legisladores para poner en marcha el proceso soberanista de Catalunya. Así las cosas, las eleciones autonómicas del próximo 27 de septiembre serán cruciales para decidir el futuro de Catalunya.
FOTOS: Sandra Lázaro, Enric Català y ANC