El Mundo se ha sorprendido esta tarde, cerca del mediodía, al enterarse que un avión de Malasya Airlines, con cerca de 298 personas abordo, la mayoría de ellos holandeses, quienes murieron en el impacto.
El avión fue perdido del radar en cielo ucraniano y minutos después se confirmó que había caído sobre una área de Ucrania, donde hay rebeldes separatistas prorusos, quienes culpan al gobierno de Ucrania de haber derribado el avión civil.
Ha trascendido que el avión militar de Putin se cruzó con este vuelo en un momento previo al derribamiento, ya confirmado, del avión. Algunos testigos han manifestado que el avión era acompañado por cazas de Ucrania minutos previos.
Una teoría de conspiración que adquiere fuerza sostiene que fue un ataque terrorista con misil cuyo objetivo era el Presidente Putin. Según la inteligencia de EE.UU, fue un misil tierra-aire el que derribó el avión. Sin embargo, los separatistas acusaron al gobierno ucraniano y algunos especialistas han dicho que estos prorusos no tienen capacidad militar para derribar un avión a esa altura (más de 10 metros de altura), lo que pone en jaque a las dos fuerzas armadas, tanto las de Ucrania como las de Rusia.
El avión derribado es un boeing 797, igual al que desapareció hace unos meses en el océano y que también pertenecía a la misma línea aérea: Malasya Airlines.
Las principales hubo 194 holandeses, ya que el avión había despegado del aeropuerto de Ansterdam con 30 minutos de retraso.
El espacio aéreo de Ucrania fue cerrado y ya aerolíneas como la rusa Aeroflot han anunciado la suspensión de los vuelos a Ucrania.
Un video podría comprobar que la autoría del ataque es de los separatistas, en complicidad con Rusia.