Aarón Chinchilla EP. | Los diputados de Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba aprobaron por unanimidad un proyecto de ley para reformar la Constitución Política.
Tras dos días de debate, el Parlamento Cubano votó de manera unánime la reforma que, entre varios cambios, reconocería el mercado libre y la propiedad privada como parte de su economía, “sin abandonar su rumbo socialista”. La decisión final será tomada por medio de consulta popular desde el lunes 13 de agosto hasta el jueves 15 de noviembre del año en curso.
El presidente de la Asamblea Nacional, Esteban Lazo Hernández, señaló que “la discusión tiene un gran valor y ayudará a introducir a nuestro pueblo en el debate que tenemos que llevar a cabo en los próximos meses”.
Por su parte, el mandatario cubano Miguel Díaz-Canel aseveró que “Estamos frente a un proyecto que contribuirá, luego de la consulta popular y el referendo, a fortalecer la unidad de los cubanos en torno a la revolución”.
“Ha sido un debate apasionado, comprometido, crítico, patriótico y aportador, centrado en el humanismo de Fidel y Raúl (…)En los próximos días comenzará la preparación de los compañeros seleccionados en cada una de las provincias para llevar adelante el proceso de consulta popular. Este ejercicio, de participación directa del pueblo, adquiere la mayor relevancia política y será un reflejo más de que la Revolución se sustenta en la más genuina democracia. Cada cubano podrá expresar libremente sus opiniones y contribuir a alcanzar un texto constitucional que refleje el hoy y el futuro de la patria”, afirmó Díaz-Canel.
Los Cambios
Parte de las reformas que se implementarían en la carta magna cubana serían que el socialismo sería la política oficial del Estado. Dicho cambio modificaría el artículo 5 de la constitución cubana, promulgada en 1976, que determina que la sociedad buscará “avanzar hacia la sociedad comunista”.
En materia de Derechos Humanos, a diferencia de la Constitución de 1976, el proyecto implementaría el matrimonio como la unión concertada entre dos personas, sin precisar sexo, allanando legalmente el camino para el matrimonio de las personas entre el mismo sexo.
Otras reformas constitucionales incluirían la promoción de un desarrollo sostenible y el combate al cambio climático.
Por otra parte, se realizaría una modificación al artículo 21 de la Constitución que solo reconoce la propiedad estatal y la cooperativa agropecuaria. La reforma reconocería “otras formas de propiedad como la cooperativa, la propiedad mixta y la propiedad privada. Asimismo, se admitiría la inversión extranjera como “una necesidad y un elemento importante del desarrollo”.
A pesar de ello, se indicaría que “la empresa estatal es el sujeto principal de la economía como generador de la riqueza del país” y que “la propiedad socialista de todo el pueblo es el núcleo fundamental”.
La nueva Carta Magna sería elaborada por una comisión de 33 diputados, entre ellos el secretario del Comité Central del Partido Comunista, Raúl Castro. El documento final tendría 224 artículos, divididos en 11 títulos, 24 capítulos y 16 secciones, con los fundamentos políticos de “un nuevo Estado socialista y revolucionario”.
