Allan Madriz | EP. Las reacciones no se hicieron esperar por distintos países y autoridades del planeta después de que Corea del Norte anunciara la primera prueba con una bomba de hidrógeno.
Estados Unidos llamó a Corea del Norte a acatar sus compromisos y obligaciones internacionales, y dijo que respondería a las provocaciones.
Por su parte, el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, catalogó la prueba nuclear de “inaceptable” y de “grave desafío a las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU”.
La misma China, el principal aliado de Corea del Norte, dijo que se “oponía firmemente” a este tipo de prueba y que consideraba que se había realizado a pesar de la oposición de la comunidad internacional.
“Nosotros por supuesto vamos a convocar a funcionarios de alto nivel y al embajador (para una discusión seria)”, indicó un portavoz del Ministerio de Relaciones exteriores de China.
Mientras tanto, el gabinete de ministros surcoreano tendrá este miércoles una reunión de emergencia con el Consejo Nacional de Seguridad para tratar las actividades nucleares de su vecino, indicaron medios locales.
“Esto es claramente una provocación y amenaza la vida de las personas y la seguridad”, indicó la presidenta de Corea del Sur, Park Geun-hye.
De igual manera, el gobierno de Rusia también condenó la prueba realizada por Corea del Norte, a la que calificó de “violación al derecho internacional”.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha afirmado que la prueba anunciado por Pyongyang supone una amenaza para la seguridad internacional.
“La prueba nuclear mina la seguridad regional e internacional y es una clara violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU”, indicó en un comunicado.
El Consejo de Seguridad de la ONU convoca una reunión de emergencia con motivo de la prueba nuclear realizada en Corea del Norte.