Redacción EP. Un equipo de cirujanos en Australia logró unir la cabeza de un niño que había quedado con el cuello separado tras un accidente automovilístico en el que viajaba con su hermana y su madre.
Durante el accidente Jaxon Taylor de 16 meses se rompió las vértebras c1 y c2 y la clavícula lo cual separó la cabeza del cuello, lo que se conoce como decapitación interna, cita el diario “The Sun”.
El equipo de médicos dirigidos por el cirujano espinal Geoff Askin volvieron a conectar las vértebras de Jaxon en una operación que duró más seis horas de seis horas. Para lograr la hazaña utilizaron alambre y extrajeron un trozo de costilla para unir las vértebras.
” Es la peor lesión de este tipo que he visto”, explicó Askin al canal 7 Noticias de Melbourne, Australia.
El médico resaltó la fuerza del bebé para seguir adelante: “Muchos niños no habrían sobrevivido y, de haberlo hecho, habrían quedado paralíticos o sin respiración”.
Jaxon Taylor deberá llevar a partir de ahora un esqueleto metálico en su cabeza hasta que se fusionen las vértebras. Los médicos aseguran que dentro de ocho semanas volverá a llevar una vida normal y saludable.
La exitosa cirugía se da luego que un cirujano chino y uno italiano anunciaran el primer trasplante de cabeza para el 2017 para tratar de darle un nuevo cuerpo a un multimillonario ruso.
Padre de menor emprenden campaña
Los padres de Jaxon están felices por la exitosa cirugía y son conscientes que se trata de un milagro médico que les ha permitido estar con su hijo nuevamente. Por eso han abierto a través de Change.org una convocatoria para apoyar un medida que endurezca las leyes de circulación en Australia, luego que chocaran contra un carro que realizaba maniobras en la carretera y conducido por un joven de 18 años acompañado de dos personas más.
La idea de los padres del menor es que caso como el de su familia no se vuelvan a repetir o por lo menos evitarlos.